Como Partir los discos duros en Linux

Vamos a plantear una introducción para mostrar los primeros pasos que debe conocer y entender un usuario normal para particionar su o sus discos con un sistema operativo Linux  de la familía Debian y sus dependientes (Mint, Ubuntu, MX Linux, etc.).

Este es un tema sencillo a nivel de usuario normal, pero suficiente importante para que se tenga en cuenta lo que explicaremos; sobretodo, antes de empezar el proceso de instalación.

Primero comentamos los formatos habituales que se van a utilizar.

EXT4. Es un formato típico para la raíz o base del sistema Linux de la familia Debian, también puede ser utilizado para todas las distribuciones.

FAT32. se utiliza para las particiones  /boot/efi en sistemas de arranque por UEFI.

NTFS. Es un formato de discos que utiliza el sistema operativo de Windows y que también sirve para los discos duros de datos y para copias de seguridad, pues tanto Linux como Windows los leen y escriben sin problemas.

Lo segundo que debemos tener muy claro el tipo de acceso que permite nuestro ordenador en su placa base en el apartado de Boot Menu,  nos referimos a las opciones Legacy y UEFI. Para ello será necesario acceder a la Bios y comprobarlo, no hay otro sistema, pues en los manuales nunca se especifica. UEFI es el sistema de arranque más moderno y Legacy era el antiguo, sin duda estos hechos de UEFI y Legacy forman parte de la obsolescencia programada que no podemos evitar, siempre crean avances no compatibles para tener que cambiar el ordenador hecho que sabéis que las empresas informáticas  practican descaradamente.

La forma más sencilla para particionar discos para principiantes es trabajar en el sistema Legacy, pues es más sencillo ya que no requiere una partición específica para /boo/efi.

También debemos tener en cuenta que en muchos portátiles es complicado  cambiar el disco duro interno, ello podría ser problema para poder disfrutar de diferentes sistemas operativos a la vez y tener que crear muchas particiones en nuestro disco interno. Si tenemos un disco de gran capacidad de 500 GB aproximadamente, podemos hacer particiones para tener dos sistemas operativos en el mismo disco. En este caso es importante ir con mucha precaución para evitar destruir datos.  Siempre debe instalarse primero Windows y después nuestro sistema Linux. Si se hace al revés no tendremos el gestor de arranque para Linux, Windows no  crea  el acceso a los dos sistemas.

Para simplificar el proceso de particiones y dado que actualmente los discos duros vía USB 3 son prácticamente igual de rápidos que vía SATA o nvme, instalaremos nuestro sistema Linux así. Esto evita el peligro de estropear nuestro sistema actual y nos permitirá disfrutar de tantos sistemas Linux como queramos. Incluso es recomendable dejar la Bios configurada de forma que siempre busque primero la opción USB, así no nos tendremos que preocupar en hacer nada cuando queramos un sistema vía USB lo conectamos y arrancará desde él y en caso de no estar conectado arrancara por el siguiente que hayamos definido.

En el caso de querer Windows vía USB también es posible. Directamente no se puede instalar pero  podéis acceder a la siguiente herramienta de Microsoft y lo podréis conseguir.

https://www.microsoft.com/es-es/download/details.aspx?id=56485

 

Os estaréis preguntando que es UEFI y Legacy, sencillamente son dos protocolos de arranque del sistema operativo, es lo que se llama Boot Mode en la placa base del ordenador y se activa accediendo a la BIOS.

El sistema Legacy es el tradicional de siempre que busca el arranque en los primeros sectores iniciales del disco o MBR.

Windows empezó a usar UEFI  obligando a los ordenadores a disponer de esta opción   de arranque que se sitúa en la placa base y no en el disco. Actualmente, muchos portátiles ya  no disponen del  sistema Legacy y nos vamos a tener  que conformar solo con UEFI. 

Mucho os dirán de seguridad pero lo que si está claro es que el sistema Legacy permite el uso de un mismo disco con el sistema operativo Linux instalado que se abra desde cualquier ordenador tanto por vía SATA como por vía USB sin ningún tipo de restricción.

Veamos una imagen de la BIOS de una placa de un portátil que permite escoger los dos sistemas de arranque.



Cuando gravamos una ISO de una distribución en una memoria USB y lo arrancamos por defecto  en un ordenador con UEFI arrancará con este protocolo y si lo tenemos en Legacy arrancara con esta opción. En caso de placas con las dos opciones indistintamente, como las Gigabyte Para poder escoger el tipo de instalación que queremos en necesario usar el boot device de la placa, en este caso se hace presionado F12 cuando arranca el sistema, con ello conseguiremos que la placa observe las diferentes posibilidades de arranque del sistema y las presente en la pantalla. Ello  nos permitirá escoger entre Legacy o UEFI. En este momento es cuando se  elige el tipo de instalación que queremos, en este caso escogeremos la opción TOSHIBA USB FLASH DRIVE PMAP para tenerlo en modo Legacy, observar la imagen siguiente:


 

Como cada placa es diferente, tenéis que investigar un poco. Podéis ver las opciones de arranque de diferentes marcas de la placa base en esta web:

https://yosoycomputacion.com/bootear-arrancar-usb-legacy-uefi/

Es importante perder un poco de tiempo estudiando  la placa nuestro ordenador para aprender a controlar las opciones que tiene, que pueden ser diversas y de esta forma le sacaréis el máximo partido de vuestro ordenador.

Toda la explicación hecha anteriormente condiciona el particionado del disco; Por tanto, si podemos escoger  Legacy mejor porque evitamos una partición más, en caso de disponer solo de uefi será necesario  añadir siempre una partición del sistema efi de 512 MB o más dependiendo del sistema, tal como podéis ver en la imagen.




Ahora ya podemos explicar diferentes formas de partir nuestro disco. Primero debemos saber  cual es la capacidad del mismo para poder escoger el reparto de gigas de las particiones. En nuestro ejemplo supondremos un disco de 500 GB, aproximadamente, que permite hacer todas las propuestas que queremos mostrar. Si es de 250 GB capacidad la opción 3 ya no es tan aconsejable por la falta de espacio aunque se puede hacer igual repartiendo lo más ajustado posible. Siempre tenéis la opción una vez instalada la distribución Linux de utilizar el programa Gparted y cambiar las capacidades de cada partición o crear de nuevas.

Sin duda estos hechos de UEFI y Legacy forman parte de la obsolescencia programada que no podemos evitar, siempre crean avances no compatibles para tener que cambiar el ordenador hecho que sabéis que las empresas informáticas  practican descaradamente.

1.- Primera Opción más sencilla y menos segura

En una distribución Linux, se puede instalar todo el sistema en una partición ello se puede hacer sin ningún problema, pero si reinstalamos el sistema todos nuestros archivos personales que están contenidos en la carpeta /home/nuestro_usuario se perderán, por lo que es una opción poco recomendable. Para ello:

- Primero siempre se crea una partición Linux-swap con un valor aproximado a la memoria RAM.

- El resto del disco se utiliza para la raíz del sistema (/). Con las características:

       * Formato EXT4

       * Punto de montaje raíz del sistema que se indica con el símbolo / .


 

2.- Segunda Opción con home en partición aparte y mucho más segura

Para mejorar la seguridad de nuestros archivos, vamos a poner la carpeta  del usuario en una partición del disco separada. En todas las distribuciones Linux la carpeta /home/nuestro_usuario es donde está toda nuestra información.

Durante el proceso de instalación se crea una carpeta con el nombre de usuario que hayamos escogido dentro de la carpeta home del sistema, y dentro de ella  varias carpetas que normalmente tienen los nombres siguientes: Descargas, Documentos, Imágenes, Vídeos, etc.  Con esta propuesta, en caso de tener que hacer una nueva  instalación, se pueden conservar todos los archivos, imágenes, vídeos que están en esta partición home, incluso se puede conservar la misma configuración que hemos ido creando. Incluso si hemos creado más usuarios estos archivos también se conservarán.  Como podéis ver esta es una situación muy buena para nuestra comodidad. Para ello tendremos que partir el disco de la forma siguiente:

Se crea una partición Linux-swap de un valor aproximado a la memoria RAM.

Se crea una partición  de 50 GB, en este ejemplo, que se utiliza para la raíz del sistema, si tenéis problemas de espacio podéis ajustar a 20 GB. Con las características:

        - Formato EXT4

        - Punto de montaje raíz del sistema que se indica con el símbolo / .

 Se crea una tercera partición  para el resto del disco, en este caso 412,50 GB, que se utilizará como home. Con las características:

       - Formato EXT4

       - Punto de montaje /home.

 

Podéis seguir este excelente tutorial  con la carpeta del usuario en partición a parte de una instalación de linux Mint que es exactamente igual que una instalación Ubuntu.

https://forums.linuxmint.com/viewtopic.php?t=240571

Con Windows también se puede hacer, pero entendemos que se hace después de la instalación y que el método no es tan natural como en linux porque hay que cambiar la información  sustancial en el registro (Regedit). Recordemos que Linux se basa en las carpetas  para saber donde está la información y que windows se basa en su registro para conocerla.  Está claro que cada sistema tiene ventajas y inconvenientes  pero el registro de Windows acaba siendo un grave inconveniente con el tiempo pues es como un pozo negro que siempre crece.

https://www.zonademarrones.com/como-tener-el-perfil-de-windows-en-otra-particion/

3.- Tercera Opción es la ideal para compartir datos con Windows instalado también en nuestro ordenador

Además de la ya comentada en el apartado anterior 2 con la carpeta del usuario home aparte, ahora crearemos una nueva partición que llamaremos datos compartidos con formato ntfs

Esta opción permite tener acceso desde Windows y linux a nuestros archivos situados en la partición ntfs y hacernos más cómodo utilizar indistintamente los dos sistemas, además de servir como una primera copia de seguridad para nuestros datos.

Esto es así porque desde Linux podemos acceder a todos los archivos  de Windows, en cambio al revés no se puede Windows no los lee los formatos ext4.

Veamos esta opción:

Se crea una partición Linux-swap de un valor aproximado a la memoria RAM.

Se crea una partición  de 50 GB, en este ejemplo, que se utiliza para la raíz del sistema. Con las características:

        - Formato EXT4

        - Punto de montaje raíz del sistema que se indica con el símbolo / .

 Se crea una tercera partición  de 195 GB, que se utilizará como home. Con las características:

       - Formato EXT4

       - Punto de montaje /home.

Una nueva partición con el resto del disco que tendrá las siguientes características:

          - Formato ntfs

       - Como punto de montaje escogemos otros en el particionador y entonces podemos darle el nombre de datos compartidos.



 4.- Veamos las particiones que crea Windows 10 por defecto para que aprendáis a conocerlas

Recordar que a partir de Windows 10 solo se trabaja en uefi y no en Legacy.

Veamos, como ejemplo,  las particiones que crea un sistema Windows 10 en el momento de instalarse. Aquí el usuario queda dentro del sistema y si se reinstala el sistema se pierden todos los datos, archivos y preferencias del usuario.  Está claro que es una inconsistencia  de Windows que no sea una opción de instalación.

Windows 10 de forma automática al instalarlo crea las particiones siguientes en un disco de 232 GB SSD:

- La partición de 516 MiB  sirve para la recuperación del sistema, formato ntfs.

- La partición de 100 MiB sirve para boot o inicio del sistema, formato ntfs.

- El sistema se instala en la partición de  232,28 GiB.



Todas las imágenes de las particiones que se muestran en este artículo son del programa  Gparted.

Cuando instaléis vuestro sistema estaréis utilizando el particionador del propio sistema que no es tan visual como las imágenes que os hemos mostrado.

De todas formas  nosotros entendemos que la solución ideal es no compartir discos y particiones con diferentes sistemas. Actualmente, cualquier ordenador arranca y funciona bien con las salidas USB 3, pues son suficientemente rápidas,  entendemos que utilizando un disco vía USB no notaréis ninguna diferencia y tampoco tendréis ningún problema, ello os permitirá disfrutar de múltiples sistemas operativos. En nuestro caso nunca utilizamos máquinas virtuales porque trabajamos largas temporada con cada sistema y, además, preferimos sistemas reales para ver su comportamiento.